Rutas por el Pirineo: noviembre 2012

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Tablato (2.701 m.)

Ascensión desde el Balneario de Panticosa por el GR11 y el Ibón Inferior de Brazato y regreso por el Barranco de Brazato

Bajando hacia el barranco de Brazato

25 de noviembre de 2012,

Hoy hemos hecho cima en el Tablato saliendo desde el Balneario de Panticosa, y gracias, visto el mal tiempo, porque nuestra intención era hacer una circular regresando por Piniecho hasta Panticosa donde habíamos dejado un segundo coche.

La previsión meteorológica fue peor de lo esperado y tuvimos un día gris, lluvioso y con nubes bajas que dificultaban la visibilidad a partir de 2.300 metros. Si a ello sumamos la nieve y el viento frío que nos recibió en la cumbre hicimos bien en descartar el regreso por Piniecho y volver al Balneario resguardados por el fondo del barranco de Brazato, pues a fin de cuentas resultó una ruta casi circular bien maja.

Primero debemos aclarar que el Tablato aparece en muchos mapas como Pico Serrato o Sarrato. Para que la confusión sea mayor también se denomina Tablato a otra cumbre menor muy cercana, de 2.564 m., ubicada al Oeste, justo al otro lado del collado occidental en dirección a los Foratulas. Pero el verdadero Pico Serrato, a mi entender, es otro que se encuentra al norte de los Picos de Batanes, dominando la cuenca de los ibones de Bramatuero. Este último es más alto (2.888 m.) y no tiene otro nombre secundario, así que porque no otorgarle el privilegio de disponer de un nombre no compartido. Por tanto, para no crear confusiones (al menos en mi propia mente), me referiré siempre al Pico que hoy hemos ascendido como Tablato y desterraré otros nombres.

A lo que estamos. Aparcamos junto al Refugio Casa de Piedra (1.636 m.) e iniciamos la marcha subiendo por las escaleras del “Paseo de la Salud” para coger la senda que sube hacia los ibones de Brazato. El sendero coincide con el trazado del GR11 y está muy marcado. Se eleva haciendo numerosas lazadas por las laderas al Este del balneario.

Al llegar a un rellano con grandes piedras donde el arbolado desaparece (cota 1.960 m.) veremos un desvío hacia la izquierda que sube hacia los ibones de Labaza. Lo obviamos y seguimos siempre en dirección a los Ibones de Brazato.

Sobre los 2.200 metros iremos atentos porque tenemos que abandonar el GR11 y desviarnos hacia la derecha por una senda que se dirige al Ibón Inferior de Brazato. El Pico Tablato emerge al fondo, por encima de la cuenca del mencionado Ibón. Frente a nosotros se vislumbra el collado occidental y la canal que sube a dicho collado por donde caminaremos más tarde.

La senda sigue ascendiendo hasta alcanzar la altura del Ibón Inferior (2.270 m.). Lo dejaremos a nuestra izquierda y continuaremos elevándonos siguiendo los hitos de piedras y alguna marca de pintura azul.

El tiempo va empeorando y las nubes cada vez se cierran más. Hace un rato que llueve también. Vamos ganado altura por una loma que desemboca en los contrafuertes al norte del Pico Tablato hasta alcanzar un rellano de relieve tortuoso donde hay varios pequeños lagos medio congelados. Son las denominadas Hoyas de Brazato, un caos de bloques de piedras que se encuentran medio ocultas por la nieve y que son auténticas trampas “rompetobillos” en estas condiciones.

Ponemos rumbo suroeste en dirección al collado occidental, que tan pronto lo vemos como desaparece sumergido por las nubes. Atravesamos con algunos incómodos sube-bajas las pequeñas cubetas donde se alojan los lagos. Avanzamos ahora muy despacio pues las rocas están muy resbaladizas y hay que afianzar cada paso para evitar meter la pierna en un agujero y lesionarnos. Ojala la nieve hubiese estado dura porque con los crampones hubiésemos progresado mejor.

Tras un buen rato caminando a paso de tortuga nos plantamos bajo el collado. Yo voy delante y subo por la empinada ladera dejando la canal a mi izquierda. Me siento más seguro por la ladera ya que puedo apoyarme en las rocas salientes. Pronto llego al collado (2.470 m.) y espero al resto del grupo que suben por la canal. No necesitan crampones pero van despacio porque la poca nieve que hay está suelta y resbala haciendo lenta la progresión.

Una vez nos reunimos en el collado giramos a nuestra izquierda y subimos los más de doscientos metros de desnivel que nos quedan hasta la cima, envueltos en nubes, con la ropa calada y con un viento poco agradable. Afortunadamente avanzamos por una ladera orientada al sur y no tenemos nieve que complique la ascensión.

Alcanzamos la cumbre con muy poca visibilidad. Hacia el norte se adivinan los abismos y corredores que ya acumulan bastante nieve. Estamos poco rato. Descartamos bajar por Piniecho dado que ninguno conocemos esa bajada y sin visibilidad queremos evitar emociones fuertes. De hecho, mientras bajamos hacia el collado nos desviamos marcadamente del rumbo correcto. Es una de las consecuencias de la falta de visibilidad que crea una desorientación asombrosa. La niebla es uno de los mayores peligros en la montaña. Menos mal que llevamos GPS y enseguida enderezamos el rumbo.

Alcanzado el collado descendemos por fuera de la canal, siguiendo mis huellas de subida. De nuevo queda la penosa travesía por las Hoyas de Brazato, midiendo cada paso entre las rocas y las piedras. Una vez superado este obstáculo paramos a comer. Sale incluso el sol pero su presencia dura un suspiro.

Daniel propone bajar por la ruta que recorre el fondo del barranco de Brazato. Así que en lugar de continuar hacia el Ibón Inferior de Brazato nos desviamos a la izquierda buscando el fondo del barranco, al pie de las laderas de los Foratulas. Hay hitos que iremos siguiendo todo el rato y la senda se irá mostrando más marcada conforme descendamos. Pronto la nieve va desapareciendo pero las piedras están sumamente resbaladizas y nos daremos varios culazos. De nuevo tendremos que caminar con mucho tiento en las zonas más pedregosas.

Sin más novedades llegaremos por la margen orográfica derecha del barranco hasta desembocar en el antiguo edificio de la “Fuente de la Belleza”, donde se llega a apreciar un leve olor sulfuroso procedente del manantial. Estamos a solo cinco minutos del Balneario, donde llegaremos a las 4 y 20 de la tarde, tras siete horas de actividad.

Desnivel + acumulado: 1.068 m.
Horario total: 7 h.
Distancia recorrida: 12,6 Km.

Subimos por el GR11 en dirección a los ibones de Brazato. El balneario va quedando abajo

Pronto aparece frente a nosotros el Tablato oculto por las nubes y el collado y canal por donde ascenderemos

Algunas charcas completamente congeladas

Ganamos altura hacia las Hoyas de Brazato dejando el ibón Inferior de Brazato atrás

David saliendo de la canal

El otro David y Victor también a punto de salir al collado

Collado Occidental. La cumbre del fondo también parece que se llama Tablato. ¡Qué lío!

Cumbre del Tablato

Comiendo. El único momento que apareció el sol tímidamente

Bajando de nuevo hacia el ibón Inferior, pero nos desviaremos a la izda. por el Barranco

¿Vamos?, ¿Venimos?

Track del recorrido en Google

martes, 27 de noviembre de 2012

Monte Oturia (1.921 m.), circular desde Oliván

Ascenso por Susín, Casbas y descenso por Ipe, Lárrede

Los días acortan y las temperaturas bajan. Los árboles caducifolios saben que es hora de soltar sus hojas, ayudados por el viento, y entrar en su letargo invernal, como llevan haciendo millones de años

24 de noviembre de 2012,

Había ascendido al Monte Oturia por la ruta de las ermitas y también por Satué regresando después por Isún. Incluso había subido a su cima en BTT desde Yebra de Basa y también lo había circunvalado visitando algunos pueblos abandonados. Recientemente descubrí en el blog "Pirineos, Montañas y Hombres" otra nueva posibilidad, una circular que pasa por Santa Orosia partiendo de Oliván.

Me apetece subir por la vertiente norte, así que usaré el recorrido que plantean en el mencionado blog para la excursión de este sábado. La única variación será que yo pasaré por la cima pero en cambio no llegaré hasta Santa Orosia.

El viernes por la noche me llama Rafa y se apunta a la excursión con un amigo. Mejor, así tendré compañía. Y no serán los únicos, porque en el pueblo se unió al grupo un dócil perro que hizo todo el recorrido con nosotros. A falta de nombre conocido decidimos bautizarlo como “Paco”.

Quedamos a las 08:30 en la entrada de Oliván (850 m.). Atravesamos el pueblo andando y comenzamos a caminar por la pista que sube hacia el Sobrepuerto paralela al Barranco de Oliván. Pronto cruzamos el barranco por un puente y al otro lado comenzamos a ganar altitud. Llevaremos unos 200 metros recorridos cuando en una curva pronunciada vemos el cartel que marca la senda que sube a “Susín”. Abandonamos la pista y subimos por la senda, más agradable para caminar.

Ha transcurrido tan solo media hora desde que salíamos de Oliván cuando llegamos a Susín (1.067 m.). Un cruce de sendas indica “Casbas” hacia el sur, y hacia allí nos encaminamos. Ni siquiera entramos al caserío de Susín.

Seguimos ganado altitud y pronto llegamos a los restos de la aldea de Casbas de Jaca (1.175 m.), donde hay algunas construcciones ruinosas con peligro de derrumbe. Ahora continuaremos por un tramo de pista utilizada para la saca de madera. Más arriba iremos recortando algunas lazadas que hace la pista por tramos de senda, que está muy limpia ya que se han habilitado varios recorridos para BTT y se nota que la han despejado de maleza.

Cerca de la cota 1.700, donde el bosque se difumina y da paso a zona de pastos, nos alejaremos definitivamente de la pista. Seguiremos unos hitos que nos encaminan por una senda que bordea el Oturia por el Oeste. Continuamos por el trazado un rato pero cuando vemos que ya podemos enfilar directos hacia la cima del Oturia abandonamos la senda y subimos por la ladera herbosa hasta la misma cumbre (1.921 m.).

Hacemos unas fotos junto a la torreta de piedras y contemplamos el horizonte. Hoy se ven especialmente nítidas las cumbres del Macizo de Monte Perdido. Sopla un viento frío que nos invita a descender unos metros para guarecernos a sotavento y comer algo. Tras picotear y compartir algún pedazo de comida con el perro descendemos hacia el Oeste, con objeto de confluir con la senda que baja hacia Javierre del Obispo.

Alcanzada la senda la seguiremos un buen trecho. El camino algunas veces es difuso, sobre todo al atravesar las praderías, donde los arbustos y trazos del ganado nos pueden despistar. Viene bien llevar el track cargado en el GPS porque hay algunos desvíos y conviene confirmar que vamos en la dirección correcta. Habrá que ir atentos porque sobre la cota 1.440 m. se abandona la senda que baja a Javierre por otra que nos guiará de nuevo hacia el Este, siempre en sentido descendente.

Nos sorprende la frondosa y variada vegetación que puebla estas laderas más umbrías, donde encontraremos incluso hayas. El sendero es muy agradable, y las especies caducifolias adornan el camino con una alfombra de hojas secas.

Cruzaremos el barranco de Ipe o del Vallés y de nuevo giraremos en dirección Oeste. Aquí la senda se convierte en pista y ya no la abandonaremos hasta enlazar con la carretera local de Lárrede. Pasaremos entre tanto por una explanada, invadida por las aliagas, donde se alzaba la población de Ipe. No queda resto alguno de las construcciones, al menos junto al camino, aunque entre los arbustos parecían adivinarse algunos amontonamientos de piedras.

Una vez alcanzamos la carretera tendremos que girar a la derecha para dirigirnos a la cercana población de Lárrede (840 m.), donde podremos admirar la iglesia románica de San Pedro. De nuevo otro trecho de carretera antes de desviarnos a mano derecha por una pista que nos llevará directos hasta Oliván. A nuestra izquierda, en una explanada, podremos contemplar la preciosa iglesia de San Juan de Busa.

A punto de finalizar la excursión, en las cercanías del pueblo, habrá que cruzar el barranco de Oliván, que si baja crecido puede darnos algún problema pues no existe puente.

Alcanzado el pueblo todavía tenemos que subir por una empinada calle, con muretes que acotan algunas parcelas y huertos, hasta el lugar donde hemos aparcado. El perro nos lanza una última mirada, como despidiéndose tácitamente, y cada uno seguimos nuestro camino. Adiós, “Paco”.

Pararemos a tomar una cerveza en Escuer, dando por finalizada la jornada montañera y esperando vernos en otra ocasión, que será más pronto que tarde, pues a Rafa lo veré en la excursión de mañana.

Desnivel + acumulado: 1.142 m.
Horario total: 6 h.
Distancia recorrida: 20,5 Km.

Llegando a las ruinas de Casbas

Collarada y Sierra de la Partacua tras las ruinas de Casbas

Sendero, limpio y amplio, acondicionado para descender en BTT

Rafa hace equilibrios en la cima del Oturia

Paco, nuestro amigo por un día

Sendero por el recóndito Valle de Ipe

San Pedro de Lárrede, detalle del friso y sus baquetones

Oliván

Track del recorrido en Google

jueves, 22 de noviembre de 2012

El Pueyo de Jaca-Panticosa, ruta circular

Subida por la senda de Hoz y regreso por el sendero temático

Cruzando el puente de madera que salva el río Caldarés

18 de noviembre de 2012,

De nuevo aprovechamos el domingo para realizar una sencilla circular que nos permitirá pasear un par de horas respirando aire puro, el aire del bosque.

La ruta es muy sencilla y puede realizarse con niños. El único tramo un poco roto lo encontramos al regresar por el sendero temático pues los 30 metros que transitan junto al río Caldarés estaban muy resbaladizos debido al arrastre y erosión de parte de la senda con las últimas y copiosas lluvias del mes de octubre.

La senda parte del Pueyo de Jaca. Aparcamos a la salida del pueblo, por la carretera local que se dirige a Hoz de Jaca. Nada más cruzar el puente del río Caldarés veremos a mano izquierda un cartel que indica "Panticosa-Hoz".

La senda asciende por el bosque de boj por la margen orográfica izquierda del Caldarés. El sendero es umbrío, ideal también para caminar en verano. Los troncos de boj se encuentran recubiertos de barbas verdes de musgo, que junto con el mullido manto de hojas secas en el suelo le dan al bosquecillo un aspecto mágico.

Tras caminar 1,5 km. y haber salvado ya prácticamente todo el desnivel de que consta esta ruta llegaremos a un desvío, en las proximidades del barranco de Yanel. Hacia la derecha podríamos continuar en dirección a Hoz de Jaca y hacia la izquierda, por donde nosotros iremos, bajaremos hacia Panticosa.

La senda desciende de nuevo por el bosque hasta desembocar en la pista que comunica Panticosa con la Estación de Esquí. Bajaremos escasamente 100 metros por la pista hasta encontrar otro desvío a mano izquierda que indica “El Pueyo”.

El sendero recorre un tramo abancalado con un viejo murete de piedras en su parte izquierda y enseguida desciende y gira para ir a buscar un puente de madera que cruza el río Caldarés a considerable altura.

Al otro lado del puente encontraremos un rellano herboso con bancos de madera donde podemos descansar.

Nuestro recorrido gira a la izquierda tras cruzar el puente y baja en busca del río. Cuando llegamos a la altura del agua encontramos un breve trecho que está bastante resbaladizo debido al arrastre de tierra que se produjo con las copiosas lluvias de octubre.

Tras este tramo junto al cauce la senda vuelve a ascender ligeramente por el bosque, donde encontraremos algunas hayas. Veremos también algunos carteles explicativos que describen la fauna del lugar y que nos acompañarán en nuestro regreso hasta el Pueyo de Jaca. Es el llamado “Sendero Temático de la Fauna Pirenaica”.

Desnivel + acumulado: 270 m.
Horario total: 2 h.
Distancia recorrida: 4,6 Km.

Otoño en el sendero que nace en el Pueyo de Jaca

cosa, cosa?...Panticosa!

Barranco de Yanel

Otoño. Este año está siendo húmedo

Bajando a Panticosa por la alfombra de hojarasca

Llegando a Panticosa, Pico Escuellas asomando por la Ripera

Jergones utilizados por los lugareños como puertas para las pequeñas parcelas

Panticosa

Elena observa el pueblo

Sendero temático regresando al Pueyo de Jaca

Sendero temático. Marcas de PR

Track del recorrido en Google

martes, 20 de noviembre de 2012

Pic d’Aygarry (2.099 m.) y Soum d’Ypy (1.750 m.)

Circular desde Etsaut

Rafa y Daniel llegando a la cima del Aygarry

17 de noviembre de 2012,

Hoy nos vamos a investigar nuevas rutas por Francia, aprovechando que hay flujo de sur y posiblemente esté despejado al otro lado de la frontera. Luis ha propuesto dos picos de nombre impronunciable y de los que apenas encontramos información en Internet.

Un magnífico día soleado otoñal, la buena compañía y una pequeña dosis de aventura al caminar por tramos sin senda donde no teníamos claro si podríamos regresar sin “embarcarnos” contribuyeron a lograr un memorable día de montaña.

Me reúno en Jaca a las 7:30 con Daniel, Rafa y Luis. Subimos hacia Canfranc en el coche de Luis y cruzamos a Francia por el túnel del Somport. La carretera descenderá por el Vallée d’Aspe unos 12 km. hasta llegar a la población de Etsaut (597 m.).

Pasamos junto al aparcamiento de Pont de Cebers, donde se suele iniciar la ruta del Chemin de la Matûre, y continuamos hasta el mismo centro del pueblo de Etsaut. En la plaza, junto a la iglesia, hay una explanada que sirve de aparcamiento. Nosotros continuamos hacia arriba por una estrecha pista asfaltada que sube hacia unas granjas. Recorremos medio kilómetro aproximadamente hasta encontrar en una pronunciada curva hacia la izquierda el cartel indicador de la senda que vamos a recorrer (cota 700 m.).

Tenemos suerte y no hay vehículos. En la curva hay apenas espacio para aparcar un par de coches con lo cual tendremos que regresar al pueblo si no encontramos hueco, dada la estrechez de la pista.

Un cartel amarillo indica “Borde de Busteigt y Pont de la Moulette”. Esta senda es la ruta habitual de ascensión al Pic de Sesques desde Etsaut por la cabaña de Yèse.

La senda, muy bien marcada, ganará altitud sin descanso hacia el Este, con el barranco de Sadum-Ourtasse siempre a nuestra derecha.

Subimos por el bosque, donde abundan los robles, bojes y avellanos. Atravesaremos unos pastos junto a una borda donde los perros ladran furiosos y continuaremos siempre ganando altitud por tramos mixtos de bosque y algunos claros repletos de helechos secos.

Sobre la cota 1.080 m. pasamos junto a una cabaña de pastores (cabaña de Asquez). La senda sigue cuesta arriba hacia el Este. Aparecen algunos grandes ejemplares de hayas y comienzan a vislumbrarse al fondo algunas cimas nevadas a ambos lados del Col de Sesques. Al sur destaca la altiva y rocosa cima del Lespetouse.

Alcanzada la cota 1.500 m., justo donde el bosque termina, cruzaremos el barranco de Ourtasse. La senda continuará ganando altitud con rumbo sureste para rodear un montículo que oculta al otro lado la Cabaña de Yèse (1.714 m.), una sólida construcción de dos plantas de uso pastoril, cerrada con llave.

Justo al alcanzar la cabaña abandonamos la ruta habitual que continúa hacia el Pic de Sesques y giramos hacia el noroeste, directos hacia el Pic d’Aygarry, que lo veremos justo enfrente. La senda desciende ligeramente en busca del barranco de Ourtasse, que tendremos que cruzar de nuevo. Otra senda, a nuestra derecha, asciende para cruzar el barranco por el llamado Pas d’Ourtasse, por encima de unas cascadas. Es otra forma de acceder al Pico por su vertiente Noreste.

Una vez cruzado el barranco, justo al pie de las cascadas, iniciamos la ascensión por empinadas laderas de hierba en dirección a la base de Pico. Ya no hay senda, se trata de buscar la ascensión más cómoda rodeando el pico por el sur hasta atacar la ascensión final por su cara Oeste.

De nuevo unas rampas herbosas bastante inclinadas nos permiten acceder a la cresta occidental. Una vez en el filo giramos a la derecha y continuamos por el borde de la cresta hasta la misma cima (2.099 m.).

La ascensión no ha planteado ninguna dificultad importante pero con nieve el riesgo no sería nada desdeñable al existir caída por ambas vertientes.

Descansamos un rato en la cima. El paraje es realmente solitario. Al Norte vemos las cimas del Anchet, el Ronglet y el Permayou. Hacia el Este, el cercano Pic d’Isabe y el Pic de Sesques, con sus cumbres espolvoreadas de nieve. Al Sur y al Oeste, en la lejanía, se pueden observar todas las siluetas de las cumbres fronterizas importantes, desde el Anie hasta el Aspe.

Ahora viene la parte menos clara de la excursión. Queremos descubrir si regresando por el cordal podremos volver al punto de partida completando una circular.

Descendemos de la cumbre de nuevo por la cresta occidental, hacia un collado que nos separa de otra vistosa cumbre, que no tiene nombre (1.997 m.).

Subimos en pocos minutos a esta cumbre innominada y aprovechamos para comer. Hace fresco pero luce el sol. Las vistas en todas las direcciones son estupendas.

Tras el descanso bajamos hacia el oeste y continuamos por el cordal, con las fotogénicas cumbres y valles de la zona de Lescún como telón de fondo. El cordal nos obliga a subir y bajar pequeños montículos rocosos, que no ofrecen ninguna dificultad.

Tras un buen rato paseando por las alturas llegamos a una cima secundaria, sin apenas elevación importante pero que curiosamente tiene nombre, es el Soum d'Ypy (1.772 m.). A partir de aquí la cresta se complica ligeramente y nos obliga a destrepar a la izquierda, de forma muy sencilla, para sortear un espolón rocoso. Faldeamos por la empinada ladera unos 10 minutos y de nuevo volvemos a la cresta. Los árboles comienzan a aparecer y enseguida nos internamos en un pequeño pero bonito bosque de hayas, repleto de hojas secas que resbalan mucho. Descendemos un trecho por el bosque, no pudiendo evitar algún culazo.

Al salir del bosque desembocamos en un rellano herboso, que veíamos muy lejos cuando estábamos en la “Cima sin Nombre”. Encontramos las ruinas de una antigua construcción (cota 1.585 m.). Vemos Etsaut todavía muy abajo. A partir de aquí comenzamos a descender hacia el suroeste por las laderas de hierba, aproximadamente por la divisoria de aguas. Algunos tramos son empinados. En ocasiones seguimos algunas trazas de senda de ganado.

Finalmente desembocamos en el llamado “Col de la Coundre” donde confluimos con una senda más marcada. Aquí giramos al sureste y comenzamos a descender hacia unas granjas y prados que se ven ya bastante cercanos. Tendremos que sortear alguna valla de ganado electrificada, con algún “garrampazo” incluido, antes de alcanzar definitivamente la pista asfaltada en la zona alta de las granjas. Ya estamos salvados, solo nos restará descender un kilómetro por la pista hasta la curva donde habíamos aparcado el coche.

Contentos con la jornada regresamos a Jaca donde Luis nos obsequia con unas cervezas con patatas fritas en su casa que pondrán el colofón a un día de montaña francamente agradable.

Desnivel + acumulado: 1.475 m.
Horario total: 7 h.
Distancia recorrida: 13 Km.