Bonito ambiente invernal en el cordal fronterizo. Pico Arriel al fondo
Con Sara
Domingo,
8 de enero de 2017
Cuarenta metros nos separaron de la cima del Pico de Soba. Una estrecha, expuesta y
empinada canal de hielo nos aconsejó darnos la vuelta. Subir con
seguridad (y más aún, bajar) hubiera requerido utilizar dos piolets técnicos
o asegurar con cuerda, y no llevábamos ni los unos ni la otra. Es lo que tiene el
invierno, que convierte en peligrosas
las cimas más sencillas.
Aparcamos en el Embalse de la Sarra (1.450 m .) al que se llega por una estrecha
carretera que nace en Sallent de Gállego.
Comenzamos a caminar por la marcada senda del
GR11 en dirección a Respomuso. Es
enero y las noches son estrelladas y muy frías. La prueba la encontramos en los
numerosos tramos helados que jalonan el sendero donde a veces tenemos que
progresar con precaución agarrados a las ramas de los bojes o haciendo
malabarismos.
Tras recorrer casi 3 km . alcanzamos el desvío a la izquierda que indica "Pico
Arriel-Collado Soba" (cota 1.600) y allí abandonamos el cómodo trazado
del GR11.
Subimos ahora con fuerte pendiente paralelos
al barranco de Soba, donde contemplamos en el arbolado los devastadores efectos
de un alud que arrasó el barranco el año pasado.
Sobre la cota 1.830 el terreno se abre y se
arrellana en la comba herbosa donde confluyen los barrancos "Garmo
Negro" y "Soba".
Observamos por nuestra izquierda y en la lejanía el valle que asciende
hacia el Diente de Soques, que era nuestro objetivo para hoy. Conserva todavía
mucha nieve, más de la prevista, y tiene pinta de estar muy dura.
Sobre la marcha cambiamos de plan y decidimos
dirigirnos hacia el Pico Soba, cuya aproximación se realiza por laderas
soleadas, mucho más apetecibles y con poca nieve.
Cruzamos a la margen orográfica derecha del
Barranco de la Soba (a nuestra izquierda según ascendemos) y seguimos el
trazado del sendero que sube con rumbo
norte al "Collado de la Soba", que coincide con la aproximación
normal al Pico Arriel.
Salvado un primer escalón que nos deposita en
una amplia terraza (cota 2.150) abandonamos también este sendero, que se aleja
por nuestra derecha, y enfilamos directos por la lomas que suben directas hacia
el Pico Soba, que esta ligeramente al noroeste de nuestra posición.
En la cota 2.350 m . nos plantamos bajo
las abruptas paredes meridionales del Pico Soba. Aquí la nieve ya es abundante
y requiere crampones. Barajamos la posibilidad de ascender a la cima por roca,
por su vertiente soleada, pero no vemos ningún trazado claro y parece
arriesgado. Al final decidimos acometer la ascensión por su ruta normal, que se
realiza por la ladera noreste, que en esta época del año apenas ve la luz del
sol.
Nos calzamos los crampones y bordeamos la
cresta rocosa, a media altura sobre un enorme hoyo, una curiosa depresión
circular repleta de nieve. Giramos después a la izquierda y observamos el
acusado y siniestro brillo que presenta la amplia pero umbría ladera que lleva
a la cima (con buena nieve, en primavera avanzada se puede subir con esquís).
Ganamos altura mientras intentamos evitar las placas de hielo flanqueando hacia
la derecha, en dirección al cordal fronterizo donde el sol calienta ligeramente.
La cima se alza tras una corona rocosa, rota
por una canal en su centro que permite salvar la muralla.
Iniciamos el flanqueo hacia la canal. En algunos tramos
los crampones apenas clavan e incluso cuesta clavar el piolet. Hemos ganado
bastante altura y la caída por la izquierda da bastante respeto, pues la ladera
presenta el aspecto de un enorme tobogán congelado.
Con cuidado nos plantamos bajo la canal. La pendiente allí
se acentúa, a la par que la dureza de la nieve, que parece mármol.
Sara está acostumbrada a hacer corredores muy
empinados y se pone en cabeza. Con precaución llega casi a la parte alta e
incluso baraja la posibilidad de salir y continuar progresando por la roca. Pero no está nada
claro lo que nos espera arriba. A mi me entran las dudas, creo que la subida es
factible pero me preocupa mucho la bajada. Se necesitarían dos piolets técnicos o
una cuerda para asegurar. Y lo que nos espera a la salida de la canal también
tiene aspecto de estar muy duro y ser expuesto.
No hay mucho más que pensar, simplemente hoy
no es el día para hacer esta cima y nos damos la vuelta. Ya volveremos
cuando las condiciones sean propicias.
Descendemos sobre nuestros pasos con mucho
cuidado. Al llegar al pie de la montaña nos relajamos y observamos con
detenimiento en las alturas la canal y la cresta somital, que incluso parece
estar adornada con una vertical cornisa congelada. Hemos hecho bien en no
continuar.
Subiendo paralelos al Barranco de Soba. Peña Foratata y Punta Laña, donde subimos la semana pasada
Efectos del alud que arrasó el barranco el año pasado
El Barranco de Garmo Negro aun guarda mucha nieve. Descartamos la ascensión al Diente de Soques, como era nuestra intención
En su lugar ascendemos por laderas soleadas hacia el Pico de Soba. Vertiente sur del Arriel al fondo
Pequeño Arriel y Arriel
Al fondo ya vemos la rocosa vertiente sur del Pico de soba, demasiado abrupta para ascender por allí
Pico del Cuello de Soba encima de Sara y Collado de Soba en la parte derecha
Vamos variando a vertiente norte y la nieve hace acto de presencia
Ponemos crampones y bordeamos los contrafuertes del Pico de Soba en busca de su ladera noreste
El Arriel siempre a nuestra espalda
La pendiente se incrementa y encontramos incluso alguna placa de viento
Buscamos el sol flanqueando hacia el cordal fronterizo
Contemplando las vistas
Al fondo buenas vistas de las cumbres del Circo de Piedrafita
Apretando crampones
Pico Lurien asomando por el lado francés
Nos acercamos a la canal, cuya entrada se intuye en la parte sombreada y que permite superar el zócalo rocoso superior
Seguimos disfrutando de buenas vistas a nuestra espalda
Ya hemos desistido en la canal y nos tomamos un respiro en esta repisa
Nuestra ruta de ascensión en color amarillo
Un poco de zoom donde se aprecia claramente la canal y el zócalo de roca superior
Vistas hacia el embalse de la Sarra, que se ve muy pequeño abajo del todo
Embalse de la Sarra y Sierra Tendeñera, Peña Foratata y Peña Telera entre la calima
Así de divertido estaba el sendero GR11 en algunos tramos
Mapa con el recorrido realizado (fuente IGN)
Joer que bien escribes David!jeje. Queda pendiente!buen día de aventura.
ResponderEliminarUn abrazo!
Sara
:-) Gracias Sara, será que he venido inspirado del trabajo. Tenía ganas de escribir la crónica, fue una buena jornada, la cima es lo de menos...Esta ha sido solo la primera visita por esas apartadas cimas.
ResponderEliminarUn abrazo también
¡Hola David!
ResponderEliminarCreo que el problema real tenía que ser la canal pues por encima la ladera se acuesta bastante. Nosotros bajamos por allí este Otoño pasado en seco, la vía fue la correcta y creo que la decisión acertada al valorar la parte más compleja que sería la bajada pues hay que bajar por allí.
¡Que vaya bueno!
Hola Mariano!
ResponderEliminarTambién vi posteriormente una reseña tuya antigua donde hicisteis la cresta entera desde el Collado de Soba.
La salida de la canal se veía muy dura y con pendiente, pero lo que me echó para atrás fue sobre todo que por debajo de nosotros estaba todo helado y la autodetención era prácticamente imposible en caso de un resbalón.
En la parte de arriba al ver las fotos nos pareció que se había formado una cornisa en la parte izda. aunque parecía evitable rodeando por la derecha.
La montaña es tan cambiante! quizás un día vuelva y si la nieve está bien transformada hasta se pueda bajar esquiando por allí.
Salud y gracias por el comentario!
Jo! menos mal que por fin ha nevado y la cosa seguro va a mejorar porque el piri estaba delicadillo estos días... sólo las sures se dejaban..
ResponderEliminarMuy buena esa renuncia... ya sabes, es una victoria.
¡Salud y monte que no falten! a ver si nos vemos pronto.
Abrazos para los dos.
Hola Pirene,
ResponderEliminarAsí es, a veces es mejor "aplazar" las cimas.
¡Ahora si que ha nevado! Menudo nevadón ayer en Panticosa.
Salud y abrazos para vosotros también!