jueves, 3 de enero de 2013

Tres Hombres (2.271 m.), La Sierra (2.293 m.) y Tres Huegas (2.304 m.), circular


Circular con esquís a la Sierra de Condiana desde el parking Sarrios (Formigal)

Precioso y solitario el paraje que encierra el Circo del "Rincón de la Balsera"

30 de diciembre de 2012,          

   Hace unos días, cuando ascendimos a Punta Sorpena, me pareció factible bajar esquiando por las laderas que caen al sur, hacia la cuenca del Escarra. Se me ocurrió una ruta circular para comprobar mi teoría. La buena orientación de las laderas esquiables y el bajo riesgo de aludes nos animan a intentarlo hoy.

   He quedado con Carlos, que se reincorpora a las actividades montañeras tras un periodo de recuperación. Desde luego la ruta de hoy será un buen test que, como imaginaba, pasará con nota alta a pesar de los dos meses y pico que llevaba en el dique seco.

   Subimos con el coche hasta el aparcamiento de Sarrios (1.798 m.) en Formigal. Comenzamos a foquear por las pistas en dirección al telesquí de Tramacastilla. Continuaremos ganando altitud por las proximidades del telearrastre hasta muy cerca del final del mismo. Abandonamos las pistas a la altura del collado que separa las cimas Sorpena y Tres Hombres, al cual se accede en breves minutos desde la pista de esquí. En el collado giramos a la derecha para llegar con los esquís puestos hasta la cima del Pico Tres Hombres (2.271 m.), que domina por el sur la Estación de Esquí. Al final del cordal que forma la Sierra Condiana, al oeste, vemos la cumbre del Pico Tres Huegas, donde ascenderemos más tarde por su vertiente meridional si todo transcurre según lo previsto.

   Quitamos focas y bajamos esquiando hacia el sur por terreno inhóspito, alejándonos del bullicio de las pistas de esquí. Nos lanzamos por pendientes moderadas siguiendo la vaguada natural que forma un barranco que desagua 500 metros más abajo en el río Escarra. En principio nos deslizaremos con  rumbo Este, en dirección a los paredones de la cara suroeste de Punta Condiana (cuidado con este tramo si existe riesgo de aludes).

  A pesar de que el sol apenas calienta, ya que lleva toda la mañana velado por nubes que no acaban de levantar, la nieve se encuentra en muy buen estado, sobre todo en el fondo de la vaguada donde se acumulan unos centímetros de nieve polvo.

   No llevamos track, estamos “explorando” la zona, así que bajamos con cuidado, buscando el descenso más fácil y disfrutón. Poco a poco iremos perdiendo altura hacia el fondo del valle que forma el incipiente río Escarra, que se nutre del aporte de los barrancos que estamos descendiendo. Por el fondo del vallecito hay una pista de uso ganadero y vemos a lo lejos tres motos de nieve. Serán las únicas personas que veamos durante las próximas horas.

   Siguiendo la vaguada iremos virando a rumbo oeste conforme descendamos. Sobre la cota 1.800 encontramos un tramo pelado, sin nieve. Tendremos que quitarnos los esquís para cruzar el barranco y descender unos metros por la hierba. Serán pocos minutos pues el fondo del valle se encuentra bien innivado y enseguida volvemos a ponernos los esquís.

   Continuaremos deslizándonos hacia el oeste, suavemente. Nos dirigimos hacia la cabecera del valle, con Punta Escarra emergiendo justo enfrente de nosotros, aunque la cima se encuentra tapada por las nubes y se asoma tímidamente en contadas ocasiones.

   No será necesario descender hasta la pista que recorre el fondo del valle, sino que seguiremos deslizándonos sin apenas perder altitud por las laderas de la margen orográfica izquierda del río Escarra, hacia su nacimiento.

  Sobre la cota 1.750 m. toca de nuevo poner las focas para remontar hacia la Sierra de las Tres Huegas, divisoria natural entre el vallecito donde nos encontramos y el valle de Izas al oeste.

  Desde el Pico Tres Hombres habíamos observado el Pico O’Porrón, una puntiaguda cumbre al noreste de Punta Escarra. La ascensión directa hacia dicho pico parecía factible pues la ruta de aproximación daba el aspecto de estar bien innivada y no se apreciaban obstáculos de importancia. Por tanto comenzaremos a foquear en dirección a dicha cumbre. También habíamos barajado subir más hacia el norte pasando junto al Ibón de la Sierra, pero el barranco estaba abierto y daba la impresión de que había menos nieve por esa zona, así que la descartamos.

   La subida, como habíamos imaginado, es tendida y está repleta de buena nieve. Subimos siguiendo el trazado aproximado del barranco del Cantal de Balsera.

  El paraje que forma el circo del “Rincón de la Balsera” es precioso. No hay rastros de pisadas,  ni una sola huella, salvo la de algún animalillo, el manto de nieve se encuentra inmaculado. Frente a nosotros se alza la imponente Punta Escarra, cada vez más cercana, y por nuestra izquierda cierran el valle las vistosas Peñas de Calcín, con los campanales de Ip y Punta del Aguila asomando más al sur. Es muy placentero deslizarse con los esquís por estos solitarios parajes. Parece mentira que a tan poca distancia haya unas pistas de esquí.

   Tras un buen rato de travesía nos plantamos bajo la ladera Este del Pico O´Porrón. En lugar de ascender directamente, ya que se antoja empinado, giraremos hacia el norte con objeto de rodear un montículo y atacarlo por su vertiente septentrional. Conforme ganemos altitud las laderas se empinan más y más y nos vemos obligados a poner cuchillas. Menos mal que la nieve no está dura y podemos progresar, eso sí, despacio y clavando bien los cantos.

   Para evitar este tramo empinado parecería mejor opción continuar un poco más hacia el norte, escasamente 200 metros más, y acceder por el “Collado de Escarra”, que separa las cimas O´Porrón y La Sierra. Da la impresión de que la subida por ahí es más suave. Para la próxima vez ya lo sabemos.

  Una vez ganado el cordal vemos a nuestra izquierda y muy cerca el llamativo Pico O’Porrón, escoltado por su parte trasera por la intimidante Punta Escarra. Teníamos intención de subirlo pero el día ha ido empeorando y se nos está echando una fría niebla arrastrada por un cada vez más agresivo viento de norte, que sube furioso encajonado por el Valle de Izas.

   Con este panorama y con tan poca visibilidad decidimos olvidarnos de ese pico y continuamos hacia el norte en dirección al Pico Tres Huegas. Bastará con seguir por el amplio cordal con los esquís puestos. Pasaremos primero por una elevación denominada “La Sierra” (2.293 m.), y después tocará descender de nuevo para acometer la subida final al Pico de las Tres Huegas (2.304 m.).

  En la cumbre sopla un viento muy frío. Nos resguardamos a sotavento para quitar las pieles y abrigarnos y sin perder un minuto comenzamos a deslizarnos hacia las instalaciones del telesquí “Escarra”, que está unos cuantos metros por debajo de donde nos encontramos.

   Una vez alcanzamos las pistas ya solo nos restará regresar esquiando tranquilamente hasta el parking, muy contentos de haber podido completar esta circular a la Sierra Condiana.
  • Desnivel + acumulado: 1.079 m
  • Horario total: 5 h. 
  • Distancia recorrida: 13,2 Km.



Llegando al collado entre Punta Sorpena y Tres Hombres. Al otro lado nos espera el sol, aunque velado por nubes


Bajando por la vaguada hacia las paredes de Punta Condiana


Al fondo siempre con vistas hacia la Sierra de la Partacua


Nueva parada para buscar la mejor bajada


Carlos ha vuelto con muchas ganas


Cruzando el barranco


Ruta aproximada de ascenso hacia la Sierra de las Tres Huegas


Ruta aproximada de descenso de Tres Hombres que hemos seguido


Punta Escarra nos ocultaba su cumbre continuamente


Foqueando hacia el Pico O`Porrón


Desde la Sierra vemos el Pico Tres Hombres, de donde venimos


Track del recorrido en Google





2 comentarios:

  1. Curioso y singular recorrido! Una buena apuesta tranquila y lejos del bullicio!! Ciertamente se trata de un rincón olvidado y lleno de encanto!

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  2. Así es David, precioso lugar para pasar una mañana tranquila. Volveremos por allí sin duda.
    Gracias por tu visita y saludos!!

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Gracias por vuestros comentarios y sugerencias.